Respirando el aire frío,
invernal de la mañana;
con la mirada inerte,
en esta tierra lejana,
de vida y muerte.
vagan en mi mente
mil ideas...
No hay árboles en los llanos,
no hay estrellas en el cielo,
que alcance con las manos;
ni tan siquiera un reflejo,
de esa luz que iluminaba;
como reluciente espejo,
el agua de aquel pozo,
donde mi sed saciaba.
La línea del horizonte,
se tiñe con la tinta china,
de mi pluma inocente;
ya no es la línea fina,
que me hacía soñar
y aliviaba mi mente.
Aquellas bonitas flores,
ya no adornan los jardines;
porque el mal de amores,
les hizo perder su olor
y la mala hierba ,
se comió su color.
J.Plou