Soñé que una estrella
en mi casa cayó,
la recogió mi abuela
y después me la dió.
No era muy grande
ni tampoco pequeña,
mi abuelita no sabe
el porqué de esa estrella.
Lo cierto del caso
es que cayó en casa,
y cada tarde al ocaso
ella brilla y resalta.
Alejandro J. Díaz Valero