Que canto hay en ti mujer
que pasión desenfrenada cuando amas
que cuido inmenso en tus manos
cuando procreas y vives, vives
desenfadado corazón posa en mi tu mirada.
Y libráme, librános
con tu néctar piadoso de diosa silvestre
del desamor, de la ira, de la idolatría
que al mundo envuelve tantas veces
con un solo toque en fa de tus manos
tu nota natural del Dios amado.
Y libráme, librános
del odio y la rencilla
pon tu risa de angel
se rocío en la piel
da forma a nuestra arcilla
natural y deforme
para ser mejores hombres
para elevar juntos al cielo
un canto en tu nombre
que resuene en las laderas
de esa montaña enorme
y otra vez, como muchas
que no sabemos de donde
caiga una estrella de luz
en el medio del monte.