Y yo que siempre
habia sido fuerte
en el juego de miradas
y hoy por primera vez
en mi vida, mi
mirada bajaba.
No pude resistir
esos ojos grandes
y hermosos, que
con ternura me
obserbavan.
Te mire y me mirabas
y tu mirada fija como
una flecha lanzada al aire
penetraba por mis pupilas
y ami corazon llegaba.
Y entre miradas y miradas
el tiempo pasaba
y cada segundo que
transcurria mi corazon
se enamoraba.
Te mire y me mirabas.