Aguardo sol de tu mirada,
contemplo luna en tus lágrimas,
de mis palmarias letanías
aspiro a tu alma enamorada.
Para que escuches mis palabras
las digo finas y alargadas
como hojas de pinos,
estoy anclado en esta tarde
pensando cómo
decirte quién......
Quién sino yo emprenderá
riada jornada de idílicas
voces para fluir
hasta tu estancia.
Quién sino yo te soñará
cimbrando cual guajana
al viento en la vendimia
del pensamiento.
Quién sino yo trascenderá
espejismo en la alborada,
quién sino yo translucirá
en tus vitrales.
Quién sino yo pernoctará
en tu fragancia, quién, dime,
dime quién sino yo
abrazará tu llamarada.