¿Dónde el inicio
de este amor innombrable?
Tus manos, tu ternura.
¿Dónde la yema de mis dedos
iniciarán el sagrado rito?
Tu piel, tu aroma.
¿Dónde anclar la soledad
que pellizca el silencio de la noche?
Tus besos, tu aliento
¿Dónde la entrega última,
el extravío final de la consciencia?
Tu alma, tu cuerpo…