Una casa no la llenan los fantasmas
Ni hartándola de cuadros
Ni amoblada en abundancia.
Ni teniendo loza fina
Ni un baño a la romana.
Si no hay mujer
Es lo mismo que la nada.
Una casa es un desierto
Si no tienes a tu amada.
Una casa aunque pagada
No es más que una carcacha
Si no habita allí aquella que tu amas.
Una casa y mil casas para renta
Con ciudad iluminada
Es un espanto
Si en ella no hay un alma.
Y el alma es la mujer que tu querrías
La que adoras y reclamas.
Una casa es un deshecho
Que simula unas murallas
Que se caen a la vista de un hombre
Que no tiene a quien besar.
Una casa no es hogar
Ni morada
Si no está quien la engalana.
¡Ten cuidado!
Piensa bien
Antes de regalonearla
Que las cosas lucirán
Como vela en un entierro
En una casa abandonada.