La lágrima que emergió de tus ojos,
Cristalina, trémula de caer.
Una lágrima con el sabor a hiel.
Una lágrima espejo de tu ayer.
La lágrima que emergió de tus ojos,
Bajo por el cutis de tu mejilla,
Dejando tras de sí la pesadumbre.
Reflejando la humedad de tu llanto
La lágrima que emergió de tus ojos
Con el arrepentimiento adherido,
y el amargo dolor de tu hermosa alma.
ya tu lágrima sobrepasó los surcos
de tu piel arrepentida y sanó tu alma.
Aún así mi soledad me acecha.