La lluvia silenciosa cae en el alma,
la noche trae recuerdos de la infancia,
afuera, ahí, cerca de la ventana,
ladra el perro a la oscuridad, a los fantasmas,
vuelve el miedo con la tormenta fría
yo lo vi, no mentí, era una mujer,
de velo blanco y de cara triste
como esa luna que se esconde entre las rosas,
la mujer me dijo al oído, cosas misteriosas.
"Dejen a ese niño, que salió loco como el abuelo"
"¿Se acuerdan, el que hablaba con los muertos?"
Todos se burlaban de mis cuentos
y transportado a tro mundo les predije,
"La Tía Luisa no estará en su cumpleaños"
"Mijo, no diga esas cosas, que son del Diablo"
A los días, la Tía Luisa... se murió.
Fui noticia en todo el pueblo, ¡pobre de mí!
Si aquello se hubiese quedado en silencio...
Yo hubiese crecido con mis amigos,
y no encerrado como una bestia asesina,
mirando el tiempo pasar entre las nubes,
"Niño envenena a la Tía para que no se burlen"
Adiviné, la vieja de los sueños dijo la verdad
no soplo las velas la pobre Tía,
no canto alegre un año más,
de mí nadie se burla, el que lo haga,
vendrá la vieja a mi aposento,
dirá un nombre, a los pocos días,
todo el que se burle, morirá.