Horizonte que guarda más que un beso,
el encanto que esconde la mirada
de mi media naranja enamorada,
que en el tiempo me guarda amor confeso.
Ella sueña conmigo y soy el preso
de su cárcel construida de la nada,
con barrotes de sueños y apoyada
sobre firme esperanza con exceso.
Por amor he sufrido amargas penas,
pero corre optimismo por mis venas,
porque alguien llegará y será especial.
Mi poema alimenta la esperanza
de pintar mi alegría con bonanza,
al llegar mi mitad angelical.
Copyright © 2011 José Luis Calderón.