Mis versos y poemas,
son demasiados frágiles,
se debilitan en
los mares.
¿Cuántos días han pasado
sin ti?,
sin que te sienta a mi lado.
Todas las noches me desvelo,
me encuentro en una tormenta
entre mares.
Mi alma sumergida en las olas,
requebrándose en el olvido.
Me paso noches enteras
en tristes oleajes de espera.
Extrañándote, sobre todo,
en esas noches de intensas
ausencias.
Se aleja el invierno y tengo que mantener,
el frío de tu olvido.
Te sueño en los océanos,
en un mar;
en el que quiero romper mi oleaje.
Más allá del desierto,
las olas del viento,
en tus ojos quiero entrar;
en la espuma de una sola ola,
susurros llevarte.
Grietas en el mar,
han de acariciarme;
mientras el tiempo se extiende,
en mis noches de naufragios.
Desciendo en escaleras de algas marinas,
lejos, tan lejos, para llegar y ahogarme,
en el mar de mis deseos.