Duerme, vida mía,
cierra los ojos de estrellas
no temas por las ilusiones,
yo cuidaré de ellas,
duerme y sueña tranquilo
con tus playas y sus rostros,
a ser de nuevo un niño,
que yo velaré por nosotros.
Duerme y late despacio
sube y baja con angelitos
descansando en el nido de mis brazos
refugio manso e infinito,
vé y canta con las sirenas,
baila en valles de luna clara,
que aquí acariciaré tu pelo
mientras te mira callada mi alma.
Duerme y no temas, cariño,
que mañana será un día nuevo,
que en la noche abrigaré tu frío
y con el sol avivaré el fuego,
ahora duerme que pasan las horas
y la vida nunca tuvo freno
pero estaré acompañando tu paso
y velando sin prisas tu sueño.