Tu sexo me gusta así, al natural...
...ausente de fragancias y perfúmes,
de esencias y aromáticas,
de colonias y lociones.
Me enloquece inundado,
sembrado por doquier de pomarrosas
que se enredan en mis labios
como arcos iris rodeando el universo.
Tu sexo me pierde, me confunde,
me hace morir mientras viviendo,
me hace vivir mientras muriendo
me vengo en estrellas y luceros.
Me gustas hirsuta, inexplorada,
selvática en tu volcán, agreste,
olorosa a sudor, a suciedades,
a efluvios que emanan y resbalan.
Eres toda y eres nada,
desde el cielo o el infierno,
da igual, te deshaces en gemidos
que parecen silencios traicionados.
Por eso te devoro, te muerdo
y me remuerdo,
me pierdo en tus axilas, en tu boca,
en tus pantorrillas y tu nuca.
Cabalgo, me volteo, me rindo,
me reintegro, me sueño, me golpeo.
Me embobo, me enmudezco,
te exploro, te doblego, te reinvento.