Fijar horas la vista hacia el teléfono, impaciente por una llamada o mensaje tuyo, que me haga pensar que aun sigues allí, para mí.
Buscar entre miles de causas la escusa perfecta para justificar la demora de tu vos.
Vigilando cada momento y cada segundo del tiempo que paso lejos de ti.
Descartando cientos de razones por las cuales podría salir corriendo a buscarte.
Concientificando una y otra ves tu amor y mi plena confianza en ti.
Temeroso asta por causa del viento, celoso e inseguro asta de mi propia sombra.
Por eso te pido por favor.
Enamórame con tus ojos, conquístame con tu sonrisa, ámame con pación, besa mis latidos, encuentra mi razón, alimenta mi ilusión, y as tuyo mi corazón.
Para ser una y mil veces, un preso de tu amor.
Autor: Jake Robles