Alma solitaria que no encuentra donde hacer nido
Con las alas rotas vuelve a emprender el vuelo
Dejándose llevar por el viento montado en su manto las descansa
Cerrando los ojos tratando de olvidar.
Aunque en medio de la tormenta cruza el firmamento
No se detiene pensando que encontrará un lugar seguro
Donde pueda al menos por momentos no pensar
Dejando que la lluvia moje el recuerdo y pueda así tal vez desvanecerlo.
La noche cae y en su huida pero sigue adelante
Con la esperanza de que la distancia pueda separar su mente
De los recuerdos que le atormentan, los reproches que ella misma se hace
Las palabras se fueron y no se pueden regresar
Las miradas que se perdían en la inmensidad
Las explicaciones que se dieron y se pidieron pero que no llegaron
La falta de interés en recuperar lo perdido marcó el camino de tu huida.
Tal vez el sol de mañana pueda consolarte
Cuando sus rayos cálidos toquen tus alas cansadas
La esperanza vuelva a renacer y el vuelo sea menos doloroso
Tal vez otro horizonte pueda hacerte sentir segura otra vez
Siempre vuelve a amanecer y aunque esta noche parezca eterna
Mientras la tierra no se pare siempre la mañana vendrá.