Cuando niña yo era
los poemas de Neruda leía
en ese mundo yo me sumergía
y de que buena manera.
El amor su mayor musa
el amor mi más grande sueño
en sus palabras de encanto y ensueño
ya volaba esta pequeña ilusa.
Fue tanto su hechizo
que un día escribí poesía
con aquella fantasía
hecho pedazos fue mi erizo.