Quizás mañana
al no estar juntos
cuando ya nuestras vidas sean cosas aparte
yo salga caminando sin rumbo ni destino
y llegue
sin quererlo
a nuestro viejo parque
y tal vez sin pensarlo
(esas cosas ocurren)
vaya hasta el viejo roble donde tú me llevabas
y sienta de repente en la ausencia la nostalgia
y entonces
al instante
se nuble mi mirada
y después ya más tarde
cuando caiga la noche
se me ocurra sentarme en el mismo viejo banco
y aún sin convencerme
sin hacerte reproches
descubra de mi vida esta página en blanco
más volveré la espalda
he de seguir camino
(y será casualmente por aquel sendero aparte)
para sentir de pronto que ya no estás conmigo
y comprender
entonces
que quiero al viejo parque.