Tu piel haría mía
Como el agua a la fuente.
Partiendo por tu vientre que presiento
Se ha hecho a mi medida
Mi lengua sensitiva
Sabría despertar
La esencia del volcán
Que agita mi simiente.
Tu forma de gemir
Y de tu suspirar
Forzosamente harían mi erupción
Constante y permanente.
Y con mi corazón desfalleciente
Por tanta emoción
Penetraría en ti tan sutilmente
Que tu acogerías con ardor
La hoz que va a morderte
Hasta que la pasión
Desate una corriente de fluidos
Y junto a tus gemidos
Harán esa canción
Que yo quiero escuchar
Cuando quiera expulsar
Mi voz en un bramido.
Te voy a amar
De tal forma que nunca habrás sentido.
Tu manantial será mi nido.