Avila

Soledad

El eco de tu nombre retumba

como tambor y trueno, en la

amplia soledad de la noche.

 

Opaca y marchita tan solo

iluminda con los ojos de la luna

se muere seca y sola la flor

de el olvido.

 

Y yo recuerdo como el mar

es eterno como el olvido

no dolia como el viento cantaba

atraves de tus labio y tu piel temerosa

me amaba yo recuerdo como las gotas

nos alimentaban.

 

Pero que triste mente se escucha ahora

el eco de el olvido.

 

Duele el no tenerte duele

el amarte dueles como espiga

de rosa duele el no tenerte.