Razón de mi vida,
Que llenas lo más profundo de mi ser.
Sonrisa eternamente melancólica.
Razón de la locura,
Corres y te llevas mi alma
Y me dejas completamente
Viviendo de la muerte.
Te digo no me dejes,
Y tú no me oyes.
Caminas lejos, tan lejos
Que a veces pareces infinito.
Hoy más que nunca te extraño,
Más tu extrañarme ni loco.
Vida eterna tan lejana como cercana.
Fuego poco ardiente de un amor casi en cenizas.
Hoy me alejare de ti y viviré en el silencio
Del grito melancólico.