Posada en mi cama cual cisne en el agua
Se inunda mi cobija con plumas de seda
Blancura y pureza, un nido del alma
Se tejen cristales en noches serenas
Y son tus cabellos
Tejidos de cisnes, hermosas túnicas
Se esparcen al viento, hermoso delirio
Notas ilustres, música única
Dulzura transparente, golondrina de vidrio
Y ven a mí
Tú, cisne que adornas hermosas visiones
Es tu resplandor en el crepúsculo un misterio
Indiscreta exquisita en caminos de emociones
Pureza invernal, susúrrame sin remedio
Y grito:
¡Oh cisne! disuelto en mi sangre de alberca
No digas a nadie que nado en tus sueños
Inúndame con saliva, que mis labios se quejan
Calma mis frías tormentas, con amaneceres de besos
Y despierta...
Mi cisne dormido, abre tus ojos de luces ardientes
Que entre la corriente mi cuerpo se esparce
He alzado mis manos para tocar tu ambiente
En lugares escogidos que buscan mirarte
Y enrédame en tu esplendor...