Enredado entre tu pelo,
con el roce de tus labios
siento que el mundo nos sobra
que sólo es complemento,
De nuestro amor infinito
de la pasión de dos cuerpos
que luchan por ser amados
que son como el puro fuego
Como dos gotas de agua
que mecidas por el viento
hacen de sus cuerpos uno
parando con ello el tiempo.