LUNA, ACUESTATE EN MI CAMA… GUARDEMOS EL SECRETO
Bella luna,
acrisolada en el cielo/
en paseo de nubes
mirándome
con ese resplandor de estrellas.
Hoy estás fluorescente,
diamantina,
lumínica…
sonriéndole al mar.
Como escalera en luz
de tu lecho
un resplandor de vida
emana/
bañándome en ríos de plata.
Te espejas en lo inmenso
acurrucadita, risueña/
media tontita,
media boba,
enamorada y graciosa.
Así de coquetita
te meces en el viento
gravitando en tu cuna
como el divino niño del pesebre,
arropada de magia,
sumergida en la noche,
extasiada y contenta.
Reyerta de caricias
las que te brindan ojos,
caricias terciadas en tu pelo,
caricias de pupilas,
de pestañar inquieto,
la seda del amor…
tocándote con besos.
Albergando en tus sombras:
ternuras, amores, juramentos/
el apretar de manos
que entrelazan al tiempo,
el aullido de los lobos
y unas alas de ensueño,
de Este a Oeste,
clara y gris en oriente,
dorada en occidente,
oscura en medio mundo,
tornasolada al día,
reina que vas nocturna en tu silencio.
Luna, luna/ luna, luna…
¡Oh, luna que me inspira!
Que me vuelves poeta,
que destilas tu sangre
en mi papel que muerto
en ti recobra vida,
en ti surgen de nuevo...
los misterios, suspiros,
el galopar del viento,
el alma que en céfiros
gira en tu luz sonriendo.
Luna de los amantes,
¡Oh… luna de los sueños!
De las bestias siniestras,
de noctámbulos besos.
¡Ven, mécete en mi alma!
¡Hazme un sol con tu cuerpo!
No quiero ver el día
ni que amanezca luego.
Te quiero aquí en mis noches,
bañándonos en versos,
acuéstate en mi cama,
guardemos el secreto.
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