Carlo Enrique

armonía de barro

mueren las tardes es cierto,
en su agonía puedes ver borrachos
y niños impecablemente manchados de tierra por el juego;
es entonces travesía inminente de sol agachado lo que acontece.
inevitablemente
las madres regañarán, inmersas del más sublime amor.
es entonces fantasía la historia del hijo y el balón.
se vive, se vive.
los borrachos carajean, putean y a veces disgustan a las mujeres
(no a veces, siempre)
esto se amalgama en vómitos azules;
esta armonía caga flores multicolores.

Carloenrique