Ayer te dije adiós y con eso acaso
de mis recuerdos te desprendes tú,
te dije adiós; pero mi alma solo te mintió.
Ayer te dije adiós pero este cariño
que siento por ti jamás adiós te va a decir.
¿Cuánto duro aquel adiós?;
ese adiós en la que mi alma solo te mintió
fue tan solo un instante, un segundo
pero este fue tan solo un adiós
que no planifique para nosotros dos.
Ahora la soledad y el silencio
se encargan de acompañarme,
por aquel adiós que tú me dijiste,
pero también por el adiós
en el que mi alma solo te mintió.
Pero aunque te dije adiós,
a veces mis pensamientos te traen de regreso,
recuerdo tu trato conmigo
y actúo como si un adiós entre
nosotros jamás hubiera existido.
A pesar de que me duele decirlo
no te pido que regreses, ¡no!,
solo te pido que vuelvas a ser feliz
como aquella chica que un día conocí,
pero cuando triste estés tu
y necesites de mis palabras
búscame que yo estaré pensando en ti
por que aquel adiós solo fue una mentira
que mi alma jamás sintió, pero que solo te dedico.