Paranoia

Lagunas mentales. Antípoesía.

 

 

 

La nada ocupa la nada de mis desvelos,
en relación a la nada de mirarte
cuando más nada me piensas
y en la nada más te quiero

Sintiendo la nada de pensarte
cuando más pienso en nada,

sí quisiera arrancarle una sonrisa a la muerte
fingiría ser nada, escribiendo una hoja en blanco
para, que acabes en un asiento vacío
pensando tú otra vez en mi,

quizás nada recuerdes de nuestras platicas,
cuando el cielo está cubierto de nadas,
y las nubes salpiquen la nada líquida,
al marearse con tus cabellos invisibles,

cuando más imaginaria eres,
acentuando la nada de tu cuerpo,
en la fugacidad de aparearme
con la desolación de cuatro paredes,

emergiendo desde las fisuras
del entramado de madera
que ocupaste una vez,
cuando decías que el espacio
era nada cuando gritabas amar;

y la nada ocupo el espacio; y el amor fue menos que nada,
ocupando el universo y con ello mis lagunas
que se ahogan en este encierro
en cuatro paredes cuando más te pienso...