“Jamás se partiría ese cielo;
el porvenir estaba ahí,
posado sobre estos campos…”
Jean Paul Sartre
Me pregunto si hay
aplazamientos del futuro,
si se puede dejar esperando
a la primavera en una cita
casi inacabable.
Me digo (en voz baja)
que las nubes se pueden quebrar
de tanto viaje a la deriva
por mis ojos entreabiertos.
Me inquieta la calma
que antecede tormentas
y que luego de regar
de insomnios las noches
se diluye en escuálidos versos.
Me falta la convicción
de los fanáticos y sus banderas,
no logro sostener pancartas
que hablen del porvenir
sin destilar una mueca nihilista.
Pero aún así,
sé que pronto algún cielo
depositará un nuevo día
en mi ventana.