Madrigal
Me recreo en tus ojos
y besaré tus manos delicadas
manos de señora, las más amadas
que me llenan de hinojos
a mi corazón hincha de alegría
son tus manos posadas en mi frente
en mi rostro sonriente
rebozado alegría
esas manos que regalan caricias
que llenan de cariño
a mi alma de hombre-niño
son tus manos llenas de dulces brisas
Dr. Rafael Mérida Cruz-Lascano
“Hombre de Maíz” Guatemala, C.A.