Confundido entre la hojarasca,
sobre alfombra dorada
adornando el suelo,
duerme tu recuerdo.
Tiernas remembranzas
de las dulces horas,
un ayer lejano
que con prisa se llevó el Otoño.
En el viejo puente laten los abrazos,
la lluvia entona cadenciosos versos
mientras gota a gota golpea las palabras,
doloridas huyen sobre las cornisas
A la mar navegan promesas y sueños
a ser esperanza de los marineros.
Élida Isabel Gimenez Toscanini