Tu sexo en mis pupilas reflejado
el jadear, tu pelo , tu saliva
que pueden dar al tiempo muerte y vida
vida al tenerte y muerte si alejados.
Un rosario de orgasmos y sudores
entrar sin respirar , casi agotado
atisbando tus ojos ya cerrados
con unísonos ayes y temblores.
Es no sentir edad, sentirse joven
en otro mundo, el de la fantasía
canta la novena de Beethoven.
Hacerte así el amor siempre pudiera
de flores blancas darte la alegría
con pétalos de nueva primavera .