Porque a veces este frío
se cuela en la herida,
y me arranca la poca vida
que llevo por dentro.
Porque sabes que no he vuelto a ver
otra vez tu sonrisa.
Porque tus labios ahora son
como témpanos de hielo.
Y aunque quisiera darles el calor
que sé que necesitan...
mi alma está vacía,
porque sin ti estoy muriendo.
Quedan sólo tus caricias...
grabadas a fuego en mis retinas.
Quedan sólo estas palabras...
que por ti estoy sintiendo.