Kabalcanty

ARREBATO PAR

ARREBATO PAR

 

 

 

Cuando trepaste al altillo

y vi la punta de tus bragas,

me separé de mi cuerpo,

me licué por la espalda.

Corrí el suelo, asegurado,

enfriado como pura agua,

mas mis titilantes retinas

refulgían con la demanda

que tú, sinuosa, sabías

en el perfil de tu mirada.

Embotellaste mis despojos

como si no fuera nada

y en fortuito descuido,

me derramaste en tu falda.

Tendido, piernas arriba,

nos empapamos en brasas,

nos succionamos en besos

y tejimos una cama

con pétreo terrazo frío,

ensoñado entre albahacas,

para dejarnos huidos

sin sopesar el mañana.