Eran tres niñas Cordobesas, una blanca y dos morenas, la blanca era cristiana, las morenas una judía y otra mora. Tres preciosidades con cabello largo color azabache, ojos inmensos, uno verdes y otros negros. Sus bocas eran capullos de rosas, cuando se reían mostraban una fila perfecta de perlas.
Se criaron juntas compartieron sus esperanzas, sus ilusiones, sus juegos sus sueños; recibieron una buena educación; sabían idiomas, matemáticas, bordar, tocar instrumentos.
Al atardecer se sentaban en el jardín cerca de la pila de los peces, una tocaba, la otra cantaba y la otra bailaba.
Eran cariñosas, frágiles, puras, hablaban con dulzura se querían mucho y se respetaban. Vivían en tiempos de la tolerancia, de la convivencia de Al-Ándalus. Era el Siglo de Oro, del desarrollo cultural. social, económico.
Las niñas crecían sin preocupaciones, rodeadas de mucho cariño y alegría esparciendo la bondad en su derredor. Un día todo cambio, el mundo dorado que las vio nacer y crecer se derrumbo.
Se infiltro el veneno del odio, la sospecha, el terror, no entendían porque.
Empezó el éxodo, la incertidumbre el dolor, navegaron de un sitio a otro buscando orillas acogedoras, refugios.
Merche DemBar
MCN: C3X1J-79SQ3-KSR56