Te observo pequeña y frágil,
tan tierna y hermosa, tan dulce
y delicada, estas tan llena de
inocencia y me sonríes al tocar
mi rostro con tus pequeñas manitas
y mis ojos se llenan de lagrimas; porque
te amo… te amo mas que a la vida mía,
mas que a todo cuanto soy, eres mi risa y
mi tristeza eres mi luna y mi sol, eres mi niña,
mi princesa, mi único gran amor.
Eres mi hija, la dulce princesa que en el
corazón seme metió , tu tan bella tal cual rosa
y suave como algodón el producto de un gran
amor, el pedacito de cielo que Dios me regalo
para descubrir el mas puro amor.
Para mi pequeña Hanna