Permíteme la gracia
de irrumpir tu dominio,
regálame la magia
del reposo divino.
El Ser no es todo tuyo
compártelo conmigo,
y rompe la medida
de aquel temor vivido.
Un soplo de esperanza
te será permitido,
si sabes con confianza
rehacer lo perdido.
Amor de mis días
cargado de riquezas,
Por qué no abres el alma
y sacas la pereza.
No tengo algo que darte
a cambio de mi oferta,
sólo el placer de elevarte
sobre tu oculta fuerza.
Por eso amor de mis días,
Permíteme la gracia
de irrumpir tu dominio,
regálame la magia
del amor prometido.