Yo olvide vivir…
ver con alegría
la luz en un nuevo día,
amar en la calidez del alba
con el suspiro del viento y sin
saber del dolor, condene al olvido
enterrándolo en los recuerdos
más profundo del silencio.
Ignoré a mi alma…
que yacía vacía,
sumergida en la soledad
de un profundo abismo,
abrazada al infierno de la desolación
llevando un puñal en el corazón,
deseosa de un beso.
Un beso eterno
que sucumbiera en las sensaciones
de emociones al devolver la lucidez
del ser amado.
Pero me entregué a la nada
y sin recordar al olvido; lo ahogué,
en el mar de la desolación,
en la ignorancia de mi incertidumbre;
mas éste, se ha enseñado a nadar.
¡Ahora sobrevive!
Se mantiene en silencio…
condenado a la oscuridad
de mi desasosiego lo mantengo
en secreto; mundo, el baladí quedó solo
en el laberinto de mi ausencia,
completamente extraviado.
Magali Aguilar Solorza
(Quiet Night)
Sábado/Septiembre/24/2011 10:38am
Autora mexicana