guillermo jimenez

Versos para un disperso y confundido corazón

 

 

Cada calle, cada metro recorrido,

cada espacio, cada hebra de sonido

lleva incrustrado un murmullo,

toneladas de suicidios,

caricias huecas,

empapadas de calamidad 

sin más suerte de buena ventura...

 

Como una lucha ardua,

batallarse entre los abismos

de mundos dispares

te veo lejos, pensativa,

una melodía terrena que

me ahoga, me llena y me asesina...

 

Son tus ondas, tibias, serenas,

tus caderas tuyas y mías,

es tu corazón rasgado en mil pedazos 

la espera, la tortura y la salida.

 

Si no es a ti a quien debo amar,

me rebelaré contra la vida,

para surgir del aire de la tierra extinta,

ser tu alma,

la que ya no está con vida...