Poethas

Gólgota rosa (de Fabio Fiallo)

Del cuello de la amada pende un Cristo, 

joyel en oro de un buril genial, 

y parece este Cristo en su agonía 

dichoso de la vida al expirar. 


Tienen sus dulces ojos moribundos 

tal expresión de gozo mundanal, 

que a veces pienso si el genial artista 

diole a su Cristo alma de don Juan. 


Hay en la frente inclinación equívoca, 

curiosidad astuta en el mirar, 

y la intención del labio, si es de angustia, 

al mismo tiempo es contracción sensual. 


¡Oh, pequeño Jesús Crucificado, 

déjame a mí morir en tu lugar, 

sobre la tentación de ese Calvario 

hecho en las dos colinas de un rosal! 


Dame tu puesto, o teme que mi mano 

con impulso de arranque pasional, 

la faz te vuelva contra el cielo y cambie 

la oblicua dirección de tu mirar.


Fabio Fiallo