Entre tanto disgusto, noche, sustos y añoranzas
Quise volver a la plaza, de aquel recuerdo anhelado
Un dia no muy soleado, lleno de un frio taciturno
buscando un lugar o arbusto, para sentarme a tu sombra
llegamos a un punto en coma, donde se ayo tu figura
tan perfecta, sobria y pura, recordándome la historia
de por que mi noche implora, que mi mundo haga mezcla
con tu piel, tersa y morena, y tus labios color rosa.
Puedo recordar las notas, de la canción que sonaba
y mi mente canta y canta, sin desafinar ni un día
como, dulce niña mía, veo en tus ojos mis memorias
y mis labios sin tu historia, y esta plaza ya vacía
quiere que vuelvas un día, le des vida algunas rosas
ocupar la banca idónea, tal cual como fue aquel día.