En mi reflejo
observo las gotas caer de mis ojos
como la amarga tristeza
que se desprende de la lluvia viajera e impredecible
dejando una marca de sufrimiento en los rostros estupefactos,
siendo solamente los peones en este juego dominado por la desesperación.
En la oscuridad aun me observo
miles de lágrimas dominan mi cuerpo
exiliados de sus vidas,
caminantes junto a sus corazones rotos,
restauran aquello que mi llanto les quito
la felicidad.
Escrito por: Maximiliano B.