Uriel Gabriel

Ave de mi ventana

Crucé mi mirada con la tuya y aun te recuerdo,
hice lo posible por obtener tu sonrisa y la obtuve,
estas tan presente en estos sueños que me pierdo
frecuentemente, a cada rato soñando despierto.


Pudiera escribir tu nombre en este poema,lo haría.
¡Lo juro!, pero no tiene caso, creo que no importaría,
si con solo escribir poemas te obtuviera, facil podría
en mis paredes, en libros, antologías escribir cada día.


Yo lejos, porque de cerca se me nota lo nervioso,
y me vuelvo tonto, me vuelvo simple, todo plano.
Quisiera probar ese sentimiento tan hermoso
de ir volando por el mundo tomado de tu mano.


Pero eres azucar blanca, fina, en una piel morena,
yo soy aquel loco se desvela y sueña,y en mi letargo,
el azucar no la pruebo, siempre mi café es amargo,
estando tan cerca de ti y no probarte, ¡que pena!.


Te adoro y aun no te pruebo, como aquel que ama
la riqueza sin haber sido nunca en la vida rico,
Yo te adoro como lo que eres, esta hermosa dama
cual ave plumas de oro con baños de carmín en el pico.


Y te adoro, al pasar de mi ventana, en hermoso vuelo,
el caer de tu pelo, pendiente de tu paso las mañanas
y yo, en mi lugar viendo tus labios desde mi ventana,
siempre viviendo con ansias de volar en un beso, y no puedo.