Deseo inconfesable...
Refugio en el hechizo del beso a beso
Y de tu piel junto a mi piel,
De miradas desnudas
Y de la razón de ser.
Yo...tus devaneos, tú...mi Interrogante.
Los dos, en un mundo de insensatos
Profanando la cordura
Tú...mi rayo de Luna, yo...tu travesura.
Dos furtivos acorralando la cordura,
Incitando a la noche, para que robara el tiempo
Deseando que el alba nunca llegara
Y fuera eterna la pasión que nos ataba.
Carlos Alberto Domènech Delgado