Tus cabellos de deslizan
entre los dedos de mi mano.
Te siento y me hago sentir
mientras te acaricio.
Tu cielo se convierte en mi cielo
como si hubiera sido simple.
Como siempre lo fue.
Por eso parece exagerado
lo que sentimos al besarnos.
Pero lo sentimos.
O saber que se prenden lucecitas
al estrecharnos fuerte,
y nos parece natural.
Me enloquece la suavidad de tu piel
recorriendola una y otra vez.
Investigo cada colina
recorro cada valle,
en senderos nuestros
que desembocan en tus besos.
Mis manos daran caricias
sobre tu piel.
Te estremeces y nos miramos.