Te extraño de una forma inconsciente, con la fortaleza
de un amor que no perece, con la obsesión de un
niño enamorado.
Te extraño, mil veces te extraño, con el corazón en
la mano, con locura desmedida, con deseos y martirios.
Te extraño, de esta forma extraña, con mi rabia
contenida, con delirios pervertidos y tristezas
adormecidas.
Te extraño, con estas ganas de poseerte, con la
pasión de un necio enamorado, con la furia de
un corazón herido.
Te extraño, en silencio y a gritos, con las ansias
de no verte, con la rabia de un salvaje, con la
quietud de un remanso.
Te extraño, mil veces te extraño, con razón y sin
razón, con mi conciencia incoherente.
Te extraño, como nadie ha podido, como nadie ha
concebido, con esta fuerza extraña que no tiene
forma terrenal.
Te extraño y te extraño, si lo sé.... Ahora dirás que exagero, pero no es extraño lo mucho que te extraño.