TE DIGO ADIOS
Y no con la amargura del amanecer sin ti,
Sino con el olor del aire, ese olor al mar del desierto, ubicado al confín del mundo.
Te digo adiós con el corazón fuera de mi puerto,
Fuera de este armonioso coctel de frutas
Que arrojan llamas por los poros.
Te digo adiós con la firmeza del ocaso,
Con la razón vuelta río y con el alma envuelta
En una pasión de corazones.
Hoy será nuestra despedida como aquel que quiso volar hacia el fondo del mar y solo consiguió pensar en sus extremidades.
Hoy será el amanecer verde, el cielo rojo,
Y nuestros corazones violetas; porque así es el amor…
Una incoherencia de cosas llenas de estupideces...