A los hombres que les llegó el otoño
y a los que han llegado mas allá
no importa, que al paso del tiempo
la primavera atrás la hayan dejado
porque ahora han ganado mucho más
que es: la experiencia de los años
y es un privilegio, el poderla uno alcanzar.
Porque aunque pase el tiempo,
el corazón nunca envejece y se sigue
enamorando como siempre
pero aprende... a tener mas calma
y ser mas tolerante en el amor.
Es que el otoño, a ustedes los convierte,
en brisa suave del atardecer
son un sol, que sus rayos no calcinan
pero tienen un hermoso resplandor.
Es que tienen algo que los hace diferentes
que son los hilos de plata, cuando empiezan,
sus sienes y sus frentes a bordar
que parecen rayos de la luna
cuado caen serenos sobre el mar.