Me gusta el pastel
no lo puedo negar
lo puedo comer
sin indigestar.
Un pastel de fresa
o de chocolate
sin la menor pereza
devoro al instante.
Si es de vainilla
o de melocotón
con la cucharilla
doy un atracón.
Si es de frutas confitadas
demás es decirles,
que sin pensar en nada,
le doy matarile.
¡Que viva el pastel!
¡Que viva la fiesta!
ya voy a comer
no me pierdo de esta.
Alejandro J. Díaz Valero