Cuidaré cada detalle para atraparte entre las sábanas de mis ansias.
Miro mi cuerpo, recuerdo…
Te quedas impregnado en los detalles de mi pensamiento. Malvado ladrón, te robas cada uno de mis eternos suspiros.
Aunque me cueste admitirlo. Anhelo tus labios y tus caricias.
Aunque me cueste admitirlo. Quisiera que mi imaginación conjuntamente con mis deseos te conviertan en la compañía de mi soledad.
Escucho a los lejos, como mis latidos van detonando una voz que me perturba.
Ven amado mío, vuélvete real, hazme inmortal.
AR