Sal de aire, respira hondo
inspira un frío que se disipa,
se siente una guitarra dormitar
se entiende tu alma despegar.
Es acaso el momento de tu vida,
es por siempre un concierto de nostalgia
un destino soberano
tu silueta de verano, tu canción de madrugada.
Es algo más que una luna endulzada,
y un vals arrastrado entre copas que se rompen
es aquí donde nadie te asusta
es un aplauso cerrado, un compendio de lagos
como aquella llovizna pretenciosa
revelando que entre sueños
ahora soy yo el que te espero…