De altos Cedros y Abedules,
entre las flores del Campo,
viene siempre bajando
por pendientes y recodos,
el rio Carrion palenciano
aquel que tu y yo amamos tanto.
El rocio de las hierbas,
los jilgueros con su canto,
los lirios y las mariposas
hacían del medio un encanto.
Encantadora allí tu estabas,
desnuda con tu pelo negro y largo,
con la mirada encendida
y tu cuerpo palpitando
entre las verdes hierbas del campo,
dejando entrever la belleza
de tus lindos pies descalzos.
Hacia tiempo habíamos quedado
en vernos en sus orillas
para amarnos muy despacio,
tu llevarías ricas bocatas
del buen jamon serrano,
yo, una botella de vino la Rioja,
cafe,ron y tabaco.
Para disfrutar la estadía
rodeados por arboles altos,
donde miradas indiscretas
no nos verían amando.
Despacito yo llegue
y me senté a tu lado,
te volviste y me besasteis,
yo te tome en mis brazos
y se encendieron las llamas
al chocar de nuestros labios.
Como cantaban entonces
algunos bellos canarios
en las altas ramas floridas
volando de Castaño a Castaño,
mientras las mariposas
revoleteaban a nuestro lado,
y embellecían la naturaleza
de nuestros cuerpos mojados.
Rodábamos sobre las hojas secas
de aquel alto y esbelto Castaño,
apretados como nunca,
besandonos,de puro amor vibrando
gimiendo unas veces
y otras veces llorando,
huían los salta montes,
los grillitos y los sapos,
toda la tierra se encendía,
humo salia del campo,
mientras nuestros cuerpos disfrutaban
sin penas y sin quebrantos.
Un suspiro como un grito
de tu boca se había escapado,
temblo entonces todo tu cuerpo,
yo también había temblado,
mi daga entro en tu sexo,
nuestras mentes habian volado,
confundiendose nuestros ardientes efluvios
con el roció del campo,
ni tus bocatas ni mi vino,
ni mi ron ni mi tabaco,
pudieron con el hechizo......
!DE AMARTE BAJO LAS SOMBRAS DE AQUEL CASTAÑO!